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miércoles, 27 de mayo de 2015

THE BOUNCE, UN COMIC DE JOE CASSEY Y DAVID MESSINA QUE NOS TRAE ALETA EDICIONES

¡Hola, amijos de JpM! Entre el vastísimo universo superheroico, la editorial Aleta ha apostado por la publicación de THE BOUNCE, recopilando en un único tomo las aventuras de este peculiar héroe primerizo y lleno de tribulaciones. ¿Le ha salido bien la jugada a Joe Cassey y David Messina?



The Bounce es la historia de Jasper Jenkins, un triste adolescente sin objetivo en la vida que pasa los días colocado junto a su colega Zander. Un día, Zander decide someterse voluntariamente a un experimento promocionado por el Gobierno. La paga es buena y el trabajo consiste en probar una extraña sustancia, algo que Jasper no podrá rechazar, uniéndose a su amigo en lo que parece una excéntrica forma de ganar algo de dinero rápido. Lo que ambos ignoran es la verdadera naturaleza del experimento y las imprevisibles consecuencias que va a traerles en sus vidas.


Con motivo de esta traumática experiencia, Jasper sufrirá cambios que, entre otras cosas, le permitirán acceder a otra dimensión, trastornando su sentido de la realidad. Estos “cambios” le llevarán a desarrollar uno de los poderes más ridículos e hilarantes que he leído en un tebeo: rebotar contra cualquier superficie. La trama que teje Cassey reserva varios giros argumentales al lector. Aprovechando la confusión de Jasper, el guionista introduce poco a poco a otros personajes con dones extraordinarios que solo componen una pequeña parte del puzle. Por desgracia, suelen ser dead ends, ya que tienden a aparecer como destellos para dejar una pista a Jasper en su búsqueda de la verdad.

El mayor defecto que encuentro en la historia es la falta de carisma de los personajes. Tanto el héroe como los villanos no me han generado ninguna empatía, por no decir que en algunos casos llegan a caer en el tópico o resultan demasiado planos. Sirva como ejemplo el mismo héroe, que se dedica a combatir el crimen más por la inercia característica del gremio que por pura convicción, pues en todo momento se lo presenta como un chaval bastante perdido en la vida y con el único deseo de hallar la verdad a sus misteriosos poderes. Esto, en un cómic de superhéroes, y habida cuenta de la ingente cantidad de enmascarados llamativos que pululan por los tebeos, lo considero un inconveniente importante.



Entrando en el apartado gráfico, si bien The Bounce no luce un dibujo sobresaliente ni un coloreado muy de mi agrado, cumple bien su función, con algunas páginas especialmente inspiradas cuando el protagonista sufre los misteriosos cambios de dimensión. Algunas escenas de acción, eso sí, parecen dibujadas con cierta premura y ciertas viñetas habrían ganado en espectacularidad con un trazo más detallista. El diseño de los personajes, en líneas generales, es lo más flojo del conjunto, con caracterizaciones sencillas o directamente reminiscentes de otros héroes que, de hecho, no contribuyen a generar ese carisma que, como comentaba, tanto he echado en falta durante la lectura. Especial curiosidad me despierta el traje de Jasper, que más parece el de un supervillano que el de un verdadero adalid de la justicia. Más abajo teneis una muestra.


En conclusión, The Bounce es un cómic que puede resultar una lectura entretenida gracias a sus buenas dosis de acción si nos dejamos llevar de la mano de sus autores a lo largo de sus 300 páginas, pero la falta de carisma general del elenco protagonista es un obstáculo que, personalmente, ha lastrado bastante la experiencia.



+Lo mejor: No siendo la más original de las historias que he leído, el misterio de los cambios dimensionales sirve de excusa a Messina para desplegar viñetas de un corte onírico espectacular.

+Lo peor: La falta de carisma en general de todos los personajes involucrados es patente. Falta chispa a la hora de escribir sus diálogos y se echan en falta diseños más llamativos, más originales. Ben Grimm llora al ver su caricatura en este cómic.

J.