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lunes, 22 de agosto de 2016

ARI, CAZADOR DE DRAGONES. SELLO DE DRAGON 1, UN COMIC DE MANUEL GUTIERREZ Y XULIA VICENTE QUE NOS TRAE SALLYBOOKS

En Nilak, un mundo helado que se muere, o tienes la suerte de montar dragones o de combatirlos. Para Ari, un joven cazador, no hay lagarto que se le resista, o eso creía... el encuentro con una extraña jinete y su dragón cambiará su vida para siempre.



Hace un tiempo que me leí este tebeo, y desde aquí quiero agradecer a Sallybooks por mandarnos un ejemplar para reseñarlo. Obra de Manuel Gutiérrez (Noah y los dioses del paisaje) y de Xulia Vicente (Duerme pueblo, reseñado AQUÍ), he de reconocer que captaron mi atención dos detalles del álbum: el primero, y más obvio, que Xulia fuera una de sus autores (tal y como puso Jenni Duerme pueblo, me grabé este nombre en la memoria para seguirle la pista), y el segundo, que dentro de tener un carácter puramente juvenil, había algo en él que me decía que iba a ser una lectura adulta. Gracias a mi instinto, ¡porque parece que no me equivoqué del todo!

Ari, cazador de dragones. Sello de dragón 1, es el primer número de esta aventura concebida como una trilogía por sus creadores. Con un tono y estética que beben bastante (tal vez, demasiado) del manga, este álbum nos pone frente a una gran guerra entre dos tribus de Nilak, los Skayr y los Mirkyr. Nuestro protagonista, Ari, un cazador de dragones experimentado y con ciertas dotes innatas, se enrolará en este conflicto obligado por las circunstancias y por un desconcertante encuentro fortuito con una skayr.


Apenas hemos empezado a leer el tebeo cuando Manuel Gutiérrez se encarga de dejarnos claro que este no es un cómic para niños, siendo lo único que insufla ese cierto aire a "dibujitos" el estilo gráfico de Xulia Vicente. No llegamos al punto de hablar de una historia cruda y una paleta inocente, como pasaba en El código del ciempiés (reseñado AQUÍ) o el anteriormente mencionado Duerme, pueblo, pero sí que está presente ese "juego" de falsas apariencias.

Creo que Ari cumple muy bien su función de acercar al público afín a la lectura y cultura nipona un formato distinto al que están acostumbrados, el álbum. Para el resto de mortales, como yo, se trata de una lectura amena y con más fondo del que se pudiera pensar, aunque sin llegar al que hubiera querido. Entretenido.


La lectura enriquece el alma,

Dani S.